lunes, 28 de septiembre de 2009

El terror como instrumento de control


 

El terror como instrumento de control, intimidación y manipulación es un recurso usado por extremistas políticos o religiosos  desde tiempos inmemoriales,  aunque también la delincuencia común usa el terror como arma de presión para lograr sus fines,  y las minorías étnicas y políticas nunca han sido remisas  en recurrir a la violencia más descarnada para lograr sus propósitos.

 

El terror ha estado presente en toda la historia de la humanidad. El atentado a la vida inocente o ajena a un conflicto dado no es nuevo salvo en su casi cotidianidad y la casi indiferencia de aquellos que no han sido afectados por la catástrofe. La muerte del prójimo no es menos ajena porque los medios de información nos permiten visualizarla, pero paradójicamente, la muerte de Abel o de Caín nunca había  calado  tampoco en nuestras almas. 

 

Los perjuicios de la práctica terrorista se han incrementado con el desarrollo de las tecnologías de destrucción masiva  y por la presencia en casi todas las sociedades nacionales de inadaptados que asocian su trascendencia con la destrucción del vecino y sus bienes. El suicida del pasado reciente se ha ido transformado en el suicida-homicida  de la modernidad, un individuo de poca humanidad, quizás asexual,  sin visión de futuro y de una crueldad que solo pueden vislumbrar sus victimas.

 

Pero una gran parte del terrorismo moderno, califiquesmolo así, esta inspirado en conceptos religiosos,  en particular de una religión  con mucha influencia política y características expansionistas muy singulares que no solo tienen el propósito de difundir la fe y la salvación del alma, sino  proponer,  promover e imponer  estados fundamentalistas en los que la vida este circunscritas a las valoraciones de los iluminados de turno. 

 

Tal afirmación no implica que el terrorismo político haya desaparecido de la escena mundial, lo que sucede es que el llamado proceso de Globalización hace muy difícil la presencia  en estado puro de cualquier expresión publica por nefasta que esta sea. Hay terrorismo político en Colombia,  pero contaminado por la droga, el terrorismo chechenio y palestino fueron quizás en sus orígenes de carácter político-nacionalista  pero en la actualidad  ambos  están penetrados por el integrismo musulmán,  condición que se afirma con la vocación suicida de sus ejecutores.

 

El terrorismo suicida es particularmente peligroso. El suicida-homicida  tiene un mínimo de autoestima. En fin, los terroristas suicidas deben ser unos  grandes egoístas, individuos con un profundo temor a enfrentar los retos de la vida y unos enajenados que acortan una meta a la que la mayoría de los mortales no queremos llegar. Un operativo suicida no tiene que poseer una inteligencia notable ni talentos especiales, solo una fe absoluta en la victoria y la confianza de que la ruta escogida para morir garantiza la existencia en una eternidad paradisíaca.

 

Evidentemente la vocación suicida de los terroristas de la ultima generación puede estar influenciada por las miserables condiciones de vida en la que nacieron y crecieron muchos de sus ejecutores, pero el factor determinante de los que buscan la inmolación como vía de redención esta en su mente, en la profundidad de su conciencia porque los que encuentren en la muerte la única vía para resolver las diferencia e impulsar sus concepciones de vida, tienen mas de desquiciados que de justicieros. Por otra parte el terror con fines proselitistas, como el que practican algunas  sectas fundamentalistas del Islam, favorece la creencia  de una trascendencia en una divinidad justiciera que habrá de otorgar los placeres e insastifacciones inalcanzables en la vida terrenal.

 

Tampoco hay que creer que todos los terroristas que escogen la vía del suicidio para perpetrar sus actos son retrasados mentales o torpes fanáticos que compran el mito del edén de la leche y la  miel. Los hay  cultos, técnicamente capacitados y con sensibilidad para cualquier perspectiva humana que no interrumpa su sueño holocaustico de un nuevo mundo redimido en el asesinato colectivo. Esos son los lideres del terror, los inspiradores, los programadores de la muerte que también están dispuestos a sucumbir en aras de una oscura intolerancia que generaría nuevos suicidas, porque el mundo que prometen no seria viable para los que tenemos la libertad y la dignidad consustanciada con la existencia.

 

Junio 2002

Pedro Corzo






En América Latina, votar no es suficiente


 

Durante décadas los sectores democráticos  han defendido el acto de elegir como el punto culminante de todo proceso democrático, y aunque es una realidad que el ejercicio del derecho al voto es relevante e insustituible, los últimos acontecimientos que han tenido lugar en nuestro hemisferio demuestran que hace falta mucho mas que unos comicios pluralistas, universales y secretos  para lograr una sociedad estable y en progreso.

 

En varios países de América Latina se han realizado prácticas electorales legítimas, ajustadas a las reglas del juego democrático sin embargo, los resultados no siempre fueron respetados por los sectores de la sociedad que participaron  en el acto electoral.

 

Minorías técnicas, califiquémoslas así por la alta abstención electoral que tiene lugar en  muchos países, insatisfechas con los resultados y conducidas eficientemente por sus lideres, lograron desestabilizar hasta el derrocamiento a gobiernos que habían sido elegidos democráticamente. Lo ocurrido en Argentina durante el gobierno de Fernando de la Rúa, 2001, Gonzalo Sánchez de Losada, 2003, en Bolivia, y en Ecuador con Lucio Gutiérrez, 2005, son ejemplos de lo inestable  que es el fiel de  la Democracia en el continente.

 

En ocasiones el nuevo poder, producto de elecciones o consecuencia de la desestabilización, no acepta la pluralidad que debe existir en una sociedad democrática. Tampoco respeta aquellos sectores de la sociedad que no se avienen con sus planes y  en consecuencia procura establecer nuevas reglas que solo garantizan más autoridad, y le aseguran una permanencia indefinida en el poder.

 

En otros países el gobierno elegido por mayoría popular ha perdido legitimidad porque  el mandato ha evolucionado al autoritarismo, al control de los poderes públicos. La separación de poderes se convierte en ficción, las libertades públicas están constantemente amenazadas,  y la práctica de un derecho natural es considerada un privilegio que en cualquier momento puede ser suprimido. Muchos de los actos de gobierno del presidente Hugo Chávez, Venezuela, son la expresión mas genuina de como un gobierno elegido democráticamente puede evolucionar hacia practicas autoritarias.

 

Los que detentan el poder como consecuencia de la desestabilización  tienden a imponer condiciones que niegan oportunidades y derechos a los demás. Los que lo asumen por el voto popular, sino tienen una clara conciencia del estado derecho, pueden repetir el mismo modelo autoritario  imponiendo un nuevo poder que no respeta los sectores de la sociedad que no se avienen con sus planes. Establecer nuevas reglas que solo garantizan mayor autoridad y que aseguran una permanencia indefinida en el poder, son los aspectos más relevantes de su mandato.

 

Un primer paso de estos sectores  es legitimar el Gobierno con una nueva carta magna. Elaborar una constitución a imagen y semejanza del Conductor es fundamental para el futuro. Por lo regular tienden a respetar la Teoría del Derecho Moderno, a la vez que tratan de imponer mecanismos de control que en la práctica la anule. Esto es lo que, aparentemente, se propone el presidente de Bolivia, Evo Morales, al promover una nueva constitución y establecer un estado de derecho a fin a su proyecto político que le facilitaría las herramientas legales para actuar a conveniencia.

 

Parte importante de este complejo proceso es desacreditar las instituciones y personalidades que son independientes del Proyecto. Las primeras son las organizaciones políticas, después aquellas instituciones de la sociedad civil de carácter sindical o profesional. De inmediato se pone en duda la integridad ética de los sectores eclesiales y se cuestionan los intereses empresariales, todo esto junto a la demonización del pasado y la edificación de uno sobre el que se pueda sostenerse el presente y el futuro prometido.

 

Por otra parte internacionalizar el Proceso, ya sea procurarando alianzas con sus iguales en otros países, estén o no en el gobierno, fabricarse enemigos externos, es parte importante del proyecto. Es por eso que la internacionalización tiene por lo menos dos expresiones:

A.- Un aspecto es la defensa de la Nación de la ingerencia extranjera. Identificar un enemigo en el exterior que reúna una serie de condiciones es de suma importancia, particularmente si es un país poderoso.

 

También lo es  asociar a los sectores de la oposición real o  potencial, con el enemigo externo. El nacionalismo extremo no aporta legalidad pero si legitimidad, es un demostrar de que el Pueblo esta con el Poder porque el poder lo interpreta a plenitud.

B.- Generar situaciones de crisis y promover la desestabilización en los países vecinos no aliados es una práctica constante. Ejercer influencias, participar en eventos y promover alianzas favorece  la imagen de que se conduce un país influyente con un gran peso político en los asuntos internacionales.

 

La clientela política en el exterior es elemento básico de la Propuesta. La procura de aliados, de  partidarios extranjeros, identificados con el Proyecto Nacional favorece una imagen positiva de grandeza que asocia indisolublemente  a la Nación y al Líder. Hay que tener presente que estos proyectos son expansionistas, con una visión imperial de su misión y que es muy difícil mantenerse ajeno al mismo.

 

Otro aspecto a tener en cuenta es la auto desestabilización. Se inventan conspiraciones, atentados personales. Se hace referencia a factores en el exterior que auspician aventuras militaristas o subversivas. Ante estas amenazas  la represión es inevitable. Hay que actuar punitivamente porque la existencia de la Nación, la Nación y el Proyecto tienen el mismo valor, esta en peligro.

Por lo anterior es necesario difundir la importancia de  un Estado de Derecho y que el Estado de Derecho es un concepto  político, jurídico y moral en el  que la autoridad del gobierno sólo puede ejecutarse siguiendo normas escritas y acordadas libremente por la mayoría ciudadana, que  en un Estado de Derecho el gobierno tiene que responder ante una base legal que representa los deberes y derechos de  sus ciudadanos.

La concentración de Poderes en un individuo o en una institución niega el Estado Derecho. El poder del Estado tiene que estar distribuido y balanceado entre las partes que lo conforman y  el ciudadano debe tener, tanto en la práctica como en la teoría,  los mismos derechos que el Estado.

América Latina, como escribió en una ocasión Eudocio Ravines, es un continente erupción. Las crisis se producen con extrema frecuencia y a veces tienen poca relación pero por lo regular  provienen del Caudillismo, del Iluminismo, de falsos sentimientos de Justicia que solo originan nuevas victimas y mayor pobreza.

Por todo eso es necesario un respeto ciudadano al Estado de Derecho. Se precisa seguridad jurídica porque  esta nos da la certeza de elegir periódicamente a nuestros gobernantes y que estos no dispondrán a su capricho de las prerrogativas del Poder,  sino que actuaran con la certeza que cada cierto tiempo serán juzgados por el Pueblo y por la Historia, en las elecciones periódicas establecidas previamente.

Junio/2006



Pedro Corzo


¿ENROQUE EN LA OEA CONTRA ESTADOS UNIDOS?


El régimen cubano durante décadas se ha esforzado por desacreditar a la Organización de Estados Americanos, no obstante muchos países miembros  de la entidad, y en particular su secretario general, José Miguel Insulsa, se preparan para debatir la suspensión del gobierno de Cuba de la organización que tuvo lugar en el año más caliente de la Guerra Fría.

Esta propuesta que cuenta con el total respaldo de los aliados ideológicos del régimen cubano sorprende a muchos, porque La Habana no cesa de denostar contra la OEA y de afirmar que no regresara al que califica como un instrumento colonizador de Estados Unidos, lo que lleva a considerar que la idea no busca la vindicación de los Castro, sino situar al gobierno del presidente Barack Obama en una delicada disyuntiva.

La  proposición de los compañeros  de viaje del castrismo, que en número importante están disfrazados de demócratas, está más orientada contra Estados Unidos que a favorecer a los Castro porque ellos conocen la opinión de La Habana sobre la OEA.

En 1962, la reunión que sostuvo la entidad en Punta del Este, Uruguay, el gobierno de Cuba fue separado de la institución no por su alianza con la extinta Unión Soviética y la Republica Popular China, como afirma el secretario Insulsa, sino  porque se decidió por mayoría que la adhesión de cualquier miembro de la OEA al marxismo-leninismo era incompatible con el Sistema Interamericano y el alineamiento de tal Gobierno con el bloque comunista quebrantaba la unidad y solidaridad del hemisferio.

El segundo punto de la resolución precisaba "que el actual Gobierno de Cuba, que oficialmente se ha identificado como un Gobierno marxista-leninista es incompatible con los principios y propósitos del Sistema Interamericano". Posteriormente otra resolución adoptada por los cancilleres de los países miembros de la OEA, determinaba suspender toda relación comercial con  Cuba que incluyera armas o implementos militares.

Algunos olvidan que el gobierno de Cuba fue sancionado por la OEA en dos oportunidades.  En la IX Reunión de Consulta de los Cancilleres de la OEA en  julio de 1964, por una iniciativa de Venezuela como consecuencia del respaldo masivo en armas y logística que el régimen de Fidel Castro daba  a las  denominadas Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN), se resolvió la ruptura de los vínculos diplomáticos y consulares, cese de todo intercambio comercial  e interrupción de todo tránsito marítimo entre los países americanos y Cuba. México fue el único país latinoamericano que mantuvo relaciones con el régimen de La Habana y el gobierno de la isla no cesaba en su reincidencia de promover la subversión y el terrorismo en el hemisferio.

Esta no es la primera modificación que se intenta de las restricciones dictadas contra el gobierno de Cuba, aunque son diferentes los motivos que la inspiran. En 1975, cuando se determinó que cada Estado condujera sus relaciones con Cuba al nivel y en la forma que cada país estimara  conveniente, Estados Unidos voto a favor de esta propuesta, fue porque varios Estados miembros de la OEA consideraron que las mismas habían sido inefectivas e inapropiadas.

Por otra parte este proyecto de crear condiciones para el retorno de Cuba a la organización reafirma la falta de identidad política de los dirigentes de América Latina, pero también como los intereses coyunturales determinan mas que los valores y principios que proclaman los acuerdos internacionales y constituciones por las que se rigen los países del hemisferio.

Que se tenga conocimiento el gobierno de Cuba no ha renegado de la ideología que determinó su separación de la OEA,  ni se ha disculpado por la subversión terrorista que promovió en todo el continente para establecer regimenes similares al que en la isla ha imperado por cincuenta años. En 1997, Fidel Castro reivindicó la participación de su gobierno en la subversión que azotó el continente y hasta el momento La Habana no se ha excusado de esa conducta.

Los paradójico de la actual propuesta es que cuando se dictó la resolución regía en el hemisferio la doctrina  de la Autodeterminación y Soberanía de los Pueblos y no se abordó el tema que en la isla había una dictadura, pero en el presente la OEA está tutelada por la Carta Democrática Interamericana, Perú, 2001, que hace inadmisible la participación en la organización de un país que no esté sujeto a los fundamentos de la democracia representativa.

 La secretaria de Estados de Estados Unidos, Hillary Clinton, declaró ante un comité del Senado de su país que el gobierno de Cuba tiene que cumplir con los principios de la Carta democrática de la OEA, para poder reingresar al organismo, afirmó que el régimen de la isla tiene que realizar cambios democráticos previos para su retorno a la Organización de Estados Americanos.

Clinton enfatizó que los países miembros de la OEA se rigen por la Carta Democrática Interamericana y que Cuba debe estar dispuesta a dar los pasos necesarios para acatar principios que incluyen el respeto a los derechos humanos y la liberación de los presos políticos.

Cuando se debata el cese de la sanción Estados Unidos de alguna manera estará siendo juzgado, porque es  el único país del hemisferio que exige que Cuba se acoja a la Carta Democrática de la OEA, como condición para el cese de la suspensión.

Es de suponer que esta actitud de Washington siempre estuvo en los cálculos de Lula da Silva, José Miguel Insulsa y Hugo Chávez por solo mencionar los mas representativos.

La decisión del gobierno de Obama, si vota a favor de la suspensión, fijará una nueva política hacia Cuba, si elige lo contrario quedará demostrado que Estados Unidos está solo en el hemisferio, lo que indudablemente tendrá un alto costo político en lo que a su liderazgo continental respecta, y podría determinar la configuración de otro organismo regional sin Estados Unidos y la reafirmación de Brasil como el nuevo árbitro del continente.

Pedro Corzo

Junio 2009.





ENTRE GENERALES Y DOCTORES


 

La historia de Cuba y tal vez, todas las historias de nuestras naciones han tenido lo que puede considerarse un denominador común en lo que al usufructúo de cualquier forma de poder respecta; y ese elemento constante se hace aún más evidente si nos referimos al poder político y es que el Poder, (autoridad física, moral y espiritual) transita de alguna forma por un elitismo que puede estar signado por el conocimiento o la fortuna (doctores) o el dominio que deriva del ejército o el gobierno, (generales).

 

Estas formas de expresarse el Poder permea las sociedades sin excepción incluyendo aún aquellas en las que la civilidad es esencia y presencia y por supuesto; en las sociedades autoritarias, el control y la influencia por parte de esa élite es aún más difícil de evadir y/o sustituir porque el interés de sobrevivir anquilosa los factores del poder envolviéndolos en una constante de exclusión que pretende impedir el afloramiento de contradicciones.

 

En las sociedades cerradas, la fuerza como elemento disuasorio básico del Poder impide las naturales contradicciones de una sociedad abierta en la que los usuarios del poder pueden de alguna manera relevarse y producir cambios que enriquecen el ser y hacer de la vida pública.

 

Sin embargo, aún en la sociedad sin aparente rasgo de civilidad y que aparenta ser dirigida por un monolito iluminado que no le abaten dudas ni temores la doble estructura de la autoridad está presente, y aunque por motivos de sobre vivencia los intereses de los que llamamos Generales y Doctores se coluden, los elementos contrarios están presentes aunque sean en forma embrionaria y a la espera de su florecimiento.

 

El poder en las sociedades cerradas es excluyente y selectivo en lo que atañe a enrolar nuevos miembros en la selecta vanguardia; pero no obstante los conflictos a que se hicieron referencia están presentes porque subyacen en las diferentes personalidades, intereses individuales y hasta en diferencias conceptuales aunque se esté de acuerdo en lo esencial.

 

El debate interno en el ejercicio de la autoridad pública y privada y sus consecuencias (injusticia, privilegios, abusos, clientelismo, corrupción, mejoras sociales, progresos económicos, debates políticos,  uso de libertades y restricciones de estas, etc.), en la sociedad y el individuo fue magistralmente descrito por un novelista cubano, de principios de siglo, Carlos Loveira, en una obra de género costumbrista que tituló "Generales y Doctores".

 

El libro de marras es sin duda una radiografía de la sociedad cubana de la época ya que la describe con exactitud; descripción de grandes similitudes con la actual realidad cubana si movemos un poco los personajes y escenarios.

 

Aquellos tiempos de Generales y Doctores están reeditados hoy con más virulencia; porque nunca antes en nuestra historia republicana una selecta cofradía ha disfrutado de más autoridad para determinar política y economía, y tampoco ha estado tan disminuida la participación ciudadana en la gestión socio-política del país.

 

En Cuba los Generales mandan. El uniforme es símbolo no sólo de poder sino también de privilegios. El uniformado en sus grados más altos es un emblema de la dictadura y por lo tanto es cómplice por admisión y/o culpable por participación. El entorchado, la firmeza en la palabra, la disciplina en el gesto, es un modo de hacer y deshacer el medio que le concierne.

 

El Doctor en Cuba es poder, distinción e influencia; pero la autoridad no está vinculada a su academia, salvo que relacione su grado con la política y en ese caso al igual que el General son sostenedores de una estructura que les posibilita evadir dificultades, depredar en los derechos del prójimo en su condición de intocable fiscal y juez, y de señor de reglas y excepciones.

 

Lamentablemente los años transcurridos no han mejorado nuestra condición de ciudadanos y seguimos viendo como Generales y Doctores, a veces no son ni eso, si no Caciques y Doctos, continúan conduciendo nuestros destinos como Pueblo sin que nos decidamos a actuar en consecuencia.

 

Sería conveniente que los que cuestionamos y rechazamos el actual régimen cubano nos preocupásemos por que la selecta clase de Generales, Doctores y Doctos que nos hemos gastado en nuestra República no vuelvan a repetir su protagonismo.

 

Sería inteligente por nuestra parte respetar a los "Generales" siempre y cuando no quieran traer sus cuarteles a nuestras casas. Admirar a los "Doctores" siempre y cuando no nos usen de conejillos para sus experimentos sociales o financieros, y alejar a los "Doctos" que en su inteligencia y pillería, y promesas reiteradas nos prometen mundos que sabemos no existen.

 

Aquí, en la oposición, en el exilio, también nos gastamos los tipos de generales y doctores a los que peyorativamente Loveira se refirió en su libro. Estos personajes están más allá de las ideologías, responden a tipos humanos específicos y están entre nosotros como entre ellos como podría decir cualquier libro de los considerados sagrados.

 

El asunto no es el grado militar o el nivel académico. El elemento a tener en cuenta es la falta de escrúpulos, la incapacidad a valorar las críticas, las ansias por trepar sin respetar valores y fronteras morales y por supuesto, el mesianismo que caracteriza a cada personaje.

 

Corresponde a nosotros elegir los Generales, Doctores y Doctos que de una manera u otra van a influenciar en nuestras vidas. Esa es nuestra tarea y mientras no seamos capaces de hacer buenas elecciones, no importa donde estemos geográfica o políticamente, tendremos malos conductores

 

Pedro Corzo

Marzo 1994






Abandonó Castro al Che Guevara?.


 

La sangre del pueblo es nuestro tesoro mas grande, pero hay que usarla para salvar mas sangre del pueblo en el futuro".

Che Guevara.Tácticas y Estrategias en la revolución latinoamericana.

 

Durante mucho tiempo las posibles desavenencias entre Fidel Castro y Ernesto Guevara han sido temas de interés, y es de creer en virtud de las profundas diferencias de carácter de ambos personajes, que en mas de una ocasión, y principalmente después de 1965,  los encuentros entre los dos debieron ser extremadamente críticos.

 

Es Indudable que la personalidad de Fidel Castro sedujo a Guevara desde el primer encuentro. Confiesa el Che que desde que hablaron quedó convencido  de que debía integrarse  como un expedicionario mas en el proyectado desembarco en Cuba. Sin lugar a dudas Castro también fue atraído por su interlocutor. Descubrió en el un hombre firme, valeroso y culto a 1a vez que durante los entrenamientos a que fueron sometidos los expedicionarios por el "general" Alberto Bayo, Guevara demostró   habilidades, y una voluntad  de la que adolecían muchos de los que participaban en el entrenamiento.

 

Según testigos presénciales la relación entre ambos era por lo regular tirante, aunque al final de las discusiones Guevara fuera siempre un fiel hacedor de los mandatos de su jefe. Afirman que a pesar del mutuo respeto y  posible afecto que ambos se profesaban, existía entre los dos mucha competencia.  Sentimiento que se iría acrecentando con el tiempo por las características personales de Guevara. Es conveniente destacar que en una sociedad totalmente militarizada como 1a cubana sólo tuvo mando militar hasta septiembre de 1959, y sus "leales" siempre estuvieron dispersos en varias unidades castrenses. Por otra parte  Castro no fue remiso en enviarlos a misiones "internacionalistas", acciones militares o guerrilleras, con o sin el guerrillero argentino.

 

EI  personaje siempre estuvo rodeado por un aura mística. Su vida de viajero irresponsable, de hombre que no trabajaba con regularidad, más su  insolencia y  el desprecio hacia todo lo que afectara negativamente a su entorno más directo, junto a su participación, aunque muy modesta, en 1a defensa del gobierno  de Jacobo Arbenz en Guatemala, y el heroico control que tenia sobre su enfermedad le hacían un hombre  diferente al promedio de los individuos que acompañaron al futuro dictador cubano en su empeño.

 

EI hecho de que fuera el único dirigente de 1a Revolución capaz de escribir y  teorizar sobre experiencias y conocimientos; que se pronunciara por una revolución hemisférica a un  mes del triunfo de la  Revolución y que sus viajes, discursos y actuaciones en el exterior le dieran una personalidad independiente a la de Fidel Castro debió haber generado mas conflictos de personalidad entre estos dos individuos.

 

Las personalidades de ambos líderes eran fuertemente antagónicas. Guevara idealista, intransigente, esquemático, doctrinario, arrogante,  con fuerte inclinación a la teorización  revolucionaria,  sin abandonar la práctica que le dictaban sus valoraciones.  Fidel Castro dogmático en sus fines, con un carácter mesiánico,  ciego en su propia fe, el castrismo,  ambicioso de poder e historia, sin inclinaciones teóricas, pragmático del poder, y con un profundo sentido de la sobrevivencia  política y física. Instinto que le lleva a establecer pactos y compromisos que sabe que no va a cumplir en el mismo momento que los contrae.

 

A pesar de que fue Guevara el artífice del orden económico pos-revolucionario y que gozó durante varios años de una gran  y vasta influencia en el gobierno de la isla,  sus  enfrentamientos con dirigentes de los países del llamado "socialismo real" y las críticas públicas que profería en conferencias internacionales, fundamentalmente contra la Unión Soviética, su principal aliado en el proceso de instauración del totalitarismo en Cuba,  afectaron en gran medida el poder que detentaba. Pero aclaremos que Guevara no cuestionaba  a la desaparecida URSS por la violación de los derechos humanos ni por  la ausencia de las libertades públicas y  privadas en ese país, sino por la forma egoísta en que conducía sus relaciones con los países del tercer mundo, que eran por supuesto las que  él recomendaba.

 

Para más de un especialista en el tema,  su ostracismo  de las esferas del poder era consecuencia de su ortodoxia, de su relativa  independencia de criterios ya que seguía defendiendo formulas económicas que Fidel Castro había abandonado. Era en el gobierno una especie de conciencia de la utopía marxista ya que continuaba defendiendo el trabajo voluntario y los estímulos morales como si fueran a resolver los problemas socio-económicos de la isla. Castro estaba consciente de que para que su régimen sobreviviese era imprescindible una ayuda exterior, y que esa ayuda no se iba a producir sino se cumplían determinados requisitos.

 

El once de diciembre  de 1964 en la Asamblea General de las Naciones Unidas y en febrero de 1965 en Argel,  criticó con ferocidad a la Unión  Soviética. Sus choques con los antiguos comunistas cubanos eran cada día más severos. Sus fracasos en la conducción de la economía se hacían cada día más evidentes, lo que hacía más importante la ayuda que pudiese provenir del exterior.

 

Según se hacía más dependiente el régimen cubano del Kremlin,  más influencias ganaban los enemigos de Ernesto Guevara  y aunque Castro era partidario de la teoría del "foco guerrillero", de ´la subversión continental al  estilo guevarista,  su sentido de la oportunidad le hace   abandonar todo lo que pueda ser un lastre  a sus intereses. Por otra parte, era al interior de la nomenclatura el blanco preferido de los comunistas ortodoxos cubanos. Los ataques más encarnizados provenían de Carlos Rafael Rodríguez y Blas Roca,  máximos dirigentes del comunismo en la isla, quienes  le acusaban de no estar al día  en 1a  moderna economía marxista,  y de estar más próximos a las teorías utópicas de Moro,  que a las de Marx.

 

En julio de 1965 el gobernante cubano Fidel Castro censuró sin ambages el principio guevarista  de los incentivos morales en la creación del socialismo  y el 3 de octubre de ese mismo año disintió públicamente de la línea política internacional que había asumido Guevara, en lo que atañía a su conducta antisoviética. Poco antes el semanario uruguayo "Marcha" publicó un artículo suyo, "El Socialismo y el Hombre en Cuba"  en el que en cierta medida censuraba la forma en que Castro había conducido el ataque  al Cuartel Moncada. Todo esto permite apreciar las diferencias existentes  entre  los dos líderes revolucionarios.

 

Según Gary Prado, general boliviano, Ernesto Guevara antes de ser ejecutado  declaró que Fidel Castro le había fallado en el momento crucial de su misión,  y existen pruebas que al principio de las operaciones el régimen cubano  respaldó a la guerrilla pero  que  a partir del 21 de marzo de 1967, el apoyo  a  Guevara   y a 1os 16  cubanos que le acompañaron en la misión fue disminuyendo. Destacamos que no sólo cesó el respaldo material sino que la propaganda a su favor también fue cancelada  A partir de junio la comunicación radial con La Habana se espació, colapsando por completo en septiembre, un mes antes del final.

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Son lo que algunos consideran las criticas póstumas a Guevara por parte de Fidel Castro  las que cerrarán este trabajo. El 15 de octubre, siete días después de la muerte del guerrillero, expresó el gobernante cubano:  "La excesiva temeridad y el no tomar las precauciones debidas le llevaron a la muerte y una fuerza guerrillera no libra una batalla de más de cuatro horas".

 

 

 

Fuentes.

Ernesto Che Guevara, Mito y Realidad. Enrique Ros.

Pasajes de la Guerra Revolucionaria. Ernesto Che Guevara.

Che. Jon Lee Anderson.

Documentos, cartas, discursos y ensayos de Ernesto Guevara.

 

Pedro Corzo



Pedro Corzo
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Ernesto Guevara, Anatomia de un Mito.


 

"Debería haber habido unos cuantos fusilamientos al comienzo pero es otra cosa.".

Ernesto Guevara.

 

 

Hay hombres antológicos, individuos que independientemente a nuestros sentimientos e ideologías se les debe atribuir un peso específico en los acontecimientos políticos de su época y no cabe duda que Ernesto Guevara de la Serna, es uno de ellos.

 

Pero tales características no deben ser fundamento para generar imágenes públicas que no se corresponden con la realidad. Guevara representa todo lo contrario a nuestros valores de libertad y respeto a la dignidad humana. En varios de sus escritos, cartas y diario de vida,  afirmaba que entre los sectores culpables de la derrota de Jacobo Arbenz estaban la iglesia católica y la prensa reaccionaria. Los calificó como sectores problemáticos que requerían una atención especial para que las futuras revoluciones socialistas en otros países no padecieran los problemas que afrontaba el gobierno de  Guatemala.

 

Estando en México, no asilado,  ya que después que buscó refugio en la embajada de sus país en la capital guatemalteca salió sin problemas de la misma y permaneció por varios días en la ciudad, le escribió una carta  a su amiga Tita Infante: en la que  refería textualmente.: "Los periódicos de Las Américas publicaban mentiras. Ante todo,  no hubo asesinato ni nada que se le parezca. Debería haber habido unos cuantos fusilamientos  al comienzo pero es otra cosa. Si se hubieran producido esos fusilamientos, el gobierno hubiera conservado la posibilidad de devolver el golpe.". Apuntamos que Guevara firmó más de una carta con el seudónimo, Stalin II, por que?.

 

 Fusilar, matar,  es una pasión que pondría en práctica en Cuba. El 22 de enero de 1957, después del encuentro de "Llanos del Infierno", escribe en su diario de campaña,  sin ningún tipo de conmiseración por el hombre que había acabado de matar. "Tiré a rumbo la primera vez y fallé, el segundo disparo dio de lleno en el pecho del hombre que cayó  dejando su fusil clavado en la tierra por la bayoneta.Cubierto por el guajiro Crespo, llegué a la casa donde pude observar el cadáver y le quité  sus balas, su fusil y algunas otras pertenencias.El hombre haíia recibido un balazo en medio del pecho que debio haber partido el corazón y su muerte fue instantánea; ya presentaba los primeros síntomas de la rigidez cadavérica debido quizás al cansancio de la última jornada que habia rendido".

 

De lo mucho que hemos leído de y sobre Guevara, se podría concluir que era "el no más allá" de las virtudes y capacidades, por supuesto, después de Fidel Castro. Años más tarde, en el exilio, vi un absurdo cinematográfico en el que el gobernante cubano era una especie de peón en el juego del Gran Maestro argentino. El documental llega a afirmar que el triunfo de la insurrección contra la dictadura de Fulgencio Batista era producto de la capacidad de dirección y acción del publicitado "Che".

 

Realmente no hay otra cosa más disparatada que estas dos versiones. Ernesto Guevara era un individuo audaz, disciplinado e inteligente pero le faltaba la plasticidad y creatividad de un verdadero conductor. A esto se suma un carácter cruel, despótico e irreverente y una total intolerancia hacia aquellos que fueran adversarios de  sus postulados. No tenía, su primer fracaso en el Congo lo indica, y  el desastre que protagonizó en Bolivia lo confirma, capacidad para el primer mando, fue sin duda alguna para la subversión totalitaria un excelente teniente,  pero nunca un capitán.


Sin embargo, no cabe duda que se encontraba entre los principales colaboradores de Castro y que fue  tal vez el que más influyó en el derrotero final de la Revolución triunfante. Sus ideas políticas eran claramente marxistas, aunque se discuta si militaba en algún partido comunista. En un discurso a menos de un mes del triunfo insurreccional manifestó que había que construir una "Democracia Armada", frase de Lenin, y exhortó antes que Fidel Castro a una revolución continental, expresó: "Esta revolución no esta limitada a la nación cubana; sea este el primer paso hacia la victoria de América". 

 

Su ventaja, indudablemente, era que sabía lo que quería en un universo de dirigentes sin preparación política que se encontraban sometidos a la seducción carismática de un líder oportunista que asumía la ideología que le posibilitara un poder absoluto y de por vida.

 

Guevara estaba identificado con el marxismo más ortodoxo. Fue el primer dirigente de la Revolución, 1960, que planteó la posibilidad de que el proceso asumiese como propias las ideas de Carlos Marx y el primero también en abogar por las más estrechas relaciones con los países del campo socialista. Recordemos que fue el artífice  del primer convenio comercial entre Cuba y La Unión Soviética. Este acuerdo comprometía al Kremlin a comprar un millón de toneladas de azúcar a La Habana, y Cuba aceptaba  asociarse  a la política de "coexistencia pacifica" de Moscú. Este capitulo se puede considerar el principio del fin de la independencia política del proceso revolucionario cubano, y aunque años más tarde en cierta medida cuestionaría la supuesta solidaridad soviética y criticase las estrechas relaciones entre los dos países,  fue el principal impulsor de una asociación que resultó nefasta para ambos pueblos.

 

Su soberbia, su iluminismo, su desprecio a todo lo que no se ajustara a su voluntad, más que un supuesto sentido de la justicia, que no le caracterizaba, le impulsó en 1965 a criticar durante su visita a Argel, Argelia,  la tan proclamada solidaridad soviética acusando a ese país de ser en cierta medida cómplice del imperialismo.

 

Ernesto Guevara desde su elevada posición de comandante de la Revolución y desde los diversos cargos que ocupó en sus casi siete años de poder político en Cuba: ejecutivo del Instituto Nacional de Reforma Agraria, presidente del Banco Nacional de Cuba, directivo de la Junta Central de Planificación, Ministro de Industrias y otras importantes funciones, fue uno de los personajes claves en el enrrumbamiento de la economía de la isla hacia la estatización a un ritmo, que según especialistas, no tuvo paralelo en los primeros años de la revolución soviética, o en la China de Mao.

 

Entre el 6 de agosto al 25 de octubre de 1960 ordenó la estatización de todas las empresas estadounidenses que operaban en Cuba, un capital  aproximado de mil quinientos millones de dólares; pero también estatizó 382 compañias de capital cubano. Tan vertiginoso fue el proceso que el marxista Rene Dumont le criticó porque consideraba que era peligroso para la economía un ritmo tan vertiginoso de expropiación y control de los medios de producción, agregando que en la isla se había hecho en un año lo que Mao Tse Tung había realizado en siete.

 

La gerencia de la economía cubana por parte de Guevara resultó en fracaso. La producción cayó vertiginosamente y la productividad disminuyó a niveles sin precedentes. La irreverencia, por calificarlo de alguna manera de este personaje, llegó al extremo  de firmar con su sobrenombre "Che" los billetes que se emitieron en Cuba durante su presidencia del Banco Nacional. Desaparecieron los controles económicos en el país y la calidad de los servicios se derrumbó. El llamado estímulo moral al trabajador no motivó un mejor desempeño laboral sino que generó una indisciplina de trabajo que se ha acentuado con los años.

 

El trabajo voluntario en el plano económico resultó un derroche. Una practica política oportuna y conveniente para instaurar el totalitarismo y vencer la resistencia del ciudadano, pero en lo que a  logros económicos respecta fue otro fiasco. El control de la economía por parte de administradores públicos fue en Cuba una catástrofe, al igual que en los otros países donde había sido implantado.

 

Ernesto Guevara también se equivocó en la gestación del llamado hombre nuevo. Su intento por transformar la conciencia del individuo y su conducta se aprecia a plenitud en esa gran cantidad de hombres y mujeres jóvenes que salen al exterior en procura de una vida diferente. En esta corriente migratoria se destacan hijos de muchos de los dirigentes de la Revolución que creen en la libertad, en la economía independiente y en el derecho a elegir el tipo de vida que les plazca. Personas que rechazan el modelo económico y político vigente en Cuba.

 

Es de creer que si Guevara estuviese vivo sería uno de los disidentes más renuentes de lo que denominamos en el presente Castrismo.No porque estuviera a favor de más libertades sino porque el gobierno de La Habana para sobrevivir ha abandonado en cierta medida la ortodoxia guevarista. Ya en la década del 60, cuando apreció que la Revolución dejaba el lirismo guerrillero y la improvisación era sustituida por sistemas y métodos, que aunque demostraron ser ineficientes impedían el voluntarismo en la gestión económica y política,  mostró públicamente su disgusto.

Afirmamos que el desaparecido guerrillero sintetiza todo lo opuesto a los valores que denominamos cristianos porque en julio de 1960, durante un congreso de juventudes latinoamericanas que se celebró en  Cuba, manifestó: "La moderación es otra de las palabras que les gusta usar a los agentes de la colonia, son moderados, todos los que tienen miedo o todos los que piensan traicionar de alguna forma. El pueblo no es de ninguna manera moderado" a esta crítica al consenso, al entendimiento de partes en disputa agregó, "Nosotros, los miembros de la Revolución cubana, que somos el pueblo entero de Cuba, llamamos amigos  a nuestros amigos y enemigos a nuestros enemigos, y no admitimos términos medios: o se es amigo, o se es enemigo..................Y ese pueblo que hoy está ante ustedes, les dice que, aún cuando debiera desaparecer de la faz de la tierra porque se desatara a causa de él, una contienda atómica, y fuera su primer blanco; aun cuando desapareciera total mente esta Isla y sus habitantes, se consideraría completamente feliz, y completamente logrado, si cada uno de ustedes al llegar a sus tierras es capaz de decir: Aquí estamos. La palabra nos viene húmeda de los bosques cubanos. Hemos subido a la Sierra Maestra, y hemos conocido a la aurora, y tenemos nuestra mente y nuestras manos llenas de la semilla de la aurora, y estamos dispuestos a sembrarla en esta tierra y a defenderla para que fructifique."
Este discurso dirigido a más de 900 estudiantes de nuestro hemisferio,  un verdadero canto a la muerte y la destrucción, tuvo lugar en el marco de declaraciones del premier sovietico Nikita Jruschov  en las que manifesto que la otrora potencia mundial defendería a la Revolución Cubana a como diese  lugar.

Ernesto Guevara demostró ser un ferviente defensor de la violencia en la que tampoco cosechó triunfos, porque su extremismo y rigidez de pensamiento le impedían aprender de los errores y rectificar en los empeños. Le faltaba el sentido de la oportunidad que caracteriza a su mentor, Fidel Castro.

 

El  modesto rol que cumplio en la Guatemala de Jacobo Arbenz, la sobredimensionada invasión a Occidente y la toma de Santa Clara, incluyendo la ocupación del tren blindado, forman parte de la fantasiosa épica guerrillera que ha caracterizado a la insurrección cubana, otro mito sólo comparable al que adorna a Ernesto Guevara,  que a los casi   40  años de su muerte es mas referencia comercial y mediática que referente ideológico o político.

 

 

Fuentes.

Ernesto Che Guevara, Mito y Realidad. Enrique Ros.

Pasajes de la Guerra Revolucionaria.Ernesto Che Guevara.

Che. Jon Lee Anderson.

Documentos, cartas, discursos y ensayos de Ernesto Guevara.

 

 

Pedro Corzo.





GUEVARA, APOSTOL DE LA VIOLENCIA.


 "No soy Cristo ni un filántropo, soy todo lo contrario de un Cristo"    Ché


No comprendemos cómo en un período histórico en el que la violencia se ha convertido en algo más que detestable existan "pacifistas" que elaboren apologías de Ernesto Guevara, un individuo que independientemente de doctrinas e ideologías  fue uno de los  teóricos más consecuentes que tuvo  la violencia como práctica política en uno de las etapas mas convulsas de Nuestra América en el pasado siglo XX.

Su identificación con una de las personalidades mas despiadadas de la historia moderna la hace notar en una carta que dirige desde Costa Rica a su tía Beatriz el 10 de diciembre de 1953. "En El Paso tuve la oportunidad de pasar por los dominios de la United Fruit convenciéndome una vez más de lo terrible que son esos pulpos capitalistas. He jurado ante una estampa del viejo y llorado camarada Stalin no descansar hasta ver aniquilados estos pulpos capitalistas."

El individuo que algunos pretenden presentar como un ser justiciero y de profundo espíritu cristiano, le escribió  una carta a su madre, el 15 de julio de 1956 desde una prisión mejicana, "No soy Cristo ni un filántropo, soy todo lo contrario de un Cristo. Lucho por las cosas en las que creo con todas las armas de que dispongo y trato de dejar muerto al otro para que no me claven en ninguna cruz o en ninguna otra cosa".

Un ejemplo de su voluntad violenta y en cierto sentido sádica se aprecia en una carta que dirigió a su primera esposa Hilda Gadea, que se encontraba en Lima, Perú.  Escribe el 28 de enero de 1957, "Querida vieja: Aquí en la selva cubana, vivo y sediento de sangre, escribo estas ardientes líneas inspiradas en Martí. Como un soldado de verdad, al menos estoy sucio y harapiento, escribo esta carta sobre un plato de hojalata, con un arma a mi lado y algo nuevo, un cigarro en la boca".

Esta sed no demoró en saciarla. Segun expone  Anderson en su libro "Che", varias fuentes cubanas le describieron como asesinó a Eutimio Guerra, un supuesto delator. Refiere Anderson, "El Che se adelantó para matar a Eutimio cuando resultó evidente que nadie tomaría la iniciativa. Esto al parecer incluye a Fidel, que tras la orden de matar a Eutimio sin indicar quien debía cumplirlo, se alejó para guarecerse de la lluvia." Este crimen lo presenció el comandante del ejército rebelde Jaime Costa.

La disciplina que imponía entre sus hombres era inflexible y cruenta. Su falta de sensibilidad y misericordia se aprecia en un relato de su libro "Pasajes" en el que describe con orgullo cómo encontró moribundo a un combatiente rebelde que cumpliendo órdenes suyas fue desarmado a la primera línea del frente, en el enfrentamiento de la ciudad de Santa Clara, para adquirir un fusil, ya que le había castigado quitándole el suyo porque se había quedado dormido en una guardia.

Su conducta con los militares del antiguo régimen fue todavía  más cruel y le llevó más allá de lo que cualquier jacobino pudiera considerar una justa justicia. En Santa Clara fue el responsable de los primeros fusilamientos sin juicios ya que  simples denuncias podían llevar al inculpado a la muerte.

La Cabaña, su  primer mando después del triunfo insurreccionad, fue el lugar  donde más ex militares y colaboradores de la dictadura derrocada fueron ejecutados. Según la periodista Hart Phillips, de New York Times, unos "400 en 1os dos primeros meses"; y testimonios del periodista  Tetlon del London Daily Telegraph "en ocasiones funcionaban cuatro tribunales simultáneamente, sin abogados ni testigos de descargos,  llegando a juzgarse, contemplando la pena capital, hasta 80 personas en juicios colectivos". Relata que él (Guevara) ordenó personalmente,  entre otras, la ejecución  del teniente José Castaño Quevedo,  cuyo único crimen fue ocupar la dirección  del Buró para la Represión de Actividades Comunistas, BRAC.,  ya que en el proceso no se efectuaron demandas  contra el teniente.

Como reseña interesante puede destacarse que en 1959,  Guevara creó una fuerza subversiva en Bolivia a través del embajador cubano en La Paz, José Tabares del Real. Este esfuerzo desestabilizador se extendió hasta junio de 1961 y se desarro1ló contra el gobiemo democrático de un político de fuerte aval revolucionario, Heman Siles Suaso.

Más tarde intentó organizar una revolución en Argentina para la que se alió con elementos peronistas. Este brote abortó cuando las autoridades argentinas descubrieron dos escuelas de guerrilleros y detuvieron a un instructor militar cubano, José Ramón Alejandro. Posteriormente las autoridades bonaerenses presentaron documentos que mostraban que la Embajada de Cuba en Buenos Aires era un centro subversivo que dirigía Guevara desde La Habana. Años después, a través de Jorge Ricardo Masetti. fundador de Prensa Latina, organizó una fuerza guerrillera identificada como Ejército Guerrillero del Pueblo, que según algunos analistas incurrió en los errores tácticos que el "Che" repetiría, en Bolivia. Junto a Masetti,  muerto en el Chaco argentino, el Che moriría en el Chaco boliviano,  cayeron dos oficiales del ejército cubano que habían sido hombres de confianza de Guevara: Hermes Peña Torre y Raúl Dávila.

No cabe duda de que Ernesto Guevara poseía una inmerecida reputación en los aspectos teórico y práctico en la guerra de guerrillas que Castro no tenia. Fue uno de los propiciadores de la Conferencia Tricontinental de La Habana a principios de 1966,  que sería, según sus  planes,  el vector para las Revoluciones que convulsionarían  América,  Asia y África.

Sus frecuentes y largos viajes por el extranjero en los que profería  incendiarios discursos revolucionarios lo fueron convirtiendo en una especie de vocero de la Revolución Mundial y sus contactos directos con Ben Bella,  Gamal Abdel Nasser,  Sekou Toure, Josehf  "Tito" Broz, Ahmed  Sukarno y la cúpula del poder de la Republica Popular China y  Viet Nam acrecentaban su prestigio de individuo comprometido con cambios políticos radicales.

Sin embargo este hombre que mataría y moriría por sus convicciones asume durante su juventud una conducta inexplicable. Nunca participó activamente contra los movimientos fascistas y antijudios que existían en Argentina,  ni tampoco se vinculó a los que combatían directamente la dictadura de Juan Domingo Perón.

A pesar de su condición de miembro de la Federación Universitaria de Buenos Aires, organismo dirigido por socialistas y comunistas, no hace vida militante ni se le conocen artículos o discursos en los que exponga  sus opiniones sobre los problemas que enfrentaba su país en  aquellos días. En una palabra, no se le conocen acciones en contra de los actos de fuerza del gobierno de Juan Domingo Perón.

En enero de 1965 Guevara visita la República del Congo, Brazzaville,  y Ie ofrece colaboración a Massemba Debat en las guerrillas que éste esta creando en el Congo Kinshasa. Debat acepta, y a su regreso a Cuba informa a Fidel Castro, que considerando que era una manera de aumentar su protagonismo político y la hegemonía de la Revolución le facilita los medios y recursos para que la ya cruenta guerra africana se acentuara. Guevara parte con un contingente de 125 guerrilleros cubanos, perfectamente entrenados y mejor armados, todos veteranos de la lucha insurreccional contra el régimen de Fulgencio Batista.

Llegó a Kinshasa después de atravesar  el lago Tanganica, seis meses más tarde,  diciembre del 65 regresa a La Habana con el resto de su contingente. Decepcionado de las guerrillas congolesas.  De todas sus fracasadas acciones bélicas la menos conocida es esta del Congo. En el país africano cometió errores tácticos y estratégicos  que repetiría en Bolivia.

Pero bien,  para aseverar su apostolado de violencia reproduzcamos algunos de sus planteamientos:

A)  Durante su intervención en la Asamblea General de Naciones Unidas el 11 de diciembre de 1964, expresó: "Nosotros tenemos que decir aqui lo que es una verdad conocida, que la hemos expresado siempre ante el mundo: fusilamientos, sí, hemos fusilado, fusilamos y seguiremos fusilando mientras sea necesario. Nuestra lucha es una lucha a muerte. Nosotros sabemos cual sería el resultado de una batalla perdida y también tienen que saber los gusanos cuál es el resultado de la batalla perdida hoy en Cuba."

B) Táctica y Estrategia de la  Revoluci6n Cubana. Revista Verde Olivo Prensa Latina 8-10-68. Distribuido por Prensa Latina,  numero 3054.  "El camino pacífico está eliminado y la violencia es inevitable. Para lograr  regímenes socialistas habrán de correr  ríos de sangre y debe continuarse a ruta de la liberación aunque sea a costa de millones de víctimas atómicas".

C) Crear dos, tres... muchos Viet  Nam... es la consigna. Revista Tricon tinental, 16-4-67, órgano de la Tricontinental de Solidaridad, OSPAAAL. "El odio como factor de lucha; el odio intransigente al enemigo, que impulsa más allá de las limitaciones naturales del ser humano y lo convierte en una efectiva, violenta, selectiva y fría máquina de matar. Nuestros soldados tienen que ser así; un pueblo sin odio no puede triunfar sobre un enemigo brutal. Hay que llevar la guerra hasta donde el enemigo la lleve: a su casa, a sus lugares de diversión; hacerla total. Hay que impedirle tener un minuto de tranquilidad, un minuto de sosiego fuera de sus cuarteles, y aún dentro de los mismos: atacarlo donde quiera que se encuentre; hacerlo sentir una fiera acosada por cada lugar que transite. Entonces su moral irá decayendo. Se hará más bestial todavía, pero se notarán los signos del decaimiento que asoma.

 

Fuentes.

Ernesto Che Guevara, Mito y Realidad. Enrique Ros.

Pasajes de la Guerra Revolucionaria. Ernesto Che Guevara.

Che. Jon Lee Anderson.

Documentos, cartas, discursos y ensayos de Ernesto Guevara.

 

Pedro Corzo, es periodista y presidente del Instituto de la Memoria Histórica Cubana contra el Totalitarismo, que tiene en producción, con la direccción del cineasta Luis Guardia, un documental sobre Ernesto Guevara.



Pedro Corzo