lunes, 28 de septiembre de 2009

ES LA HORA DE HAITI Y CUBA


 

Siempre hemos luchado porque en cualquier lugar del mundo donde se sufra opresión se haga todo lo necesario para lograr la libertad del mismo. Esto es cierto para Sudáfrica, México, Haití, Cuba o cualquier nación que vea su libertad aprisionada por una opresora minoría o elite en el poder.

 

El gobierno de los Estados Unidos, su pueblo, junto a la comunidad internacional ha participado activamente en la derrota del apartheid sudafricano y su desaparición; han mostrado una buena dosis de comprensión y ayuda hacia una transición democrática de "La Oligarquía Mexicana" hacia un mecanismo gradual que esperamos convierta al pueblo mexicano en participación de su propio destino.

 

De manera positiva y junto al consenso general, Naciones Unidas ha encerrado en un "Círculo de Hierro", con un embargo total, al régimen dictatorial del general Cedras en Haití, brindándole la oportunidad de libertad y justicia para todos sus habitantes.

 

El momento es propicio para que todos unidos en Ibero América y el mundo digamos... ¡BASTA YA! a la dictadura que por 35 años ha oprimido al pueblo cubano y que es condenada por toda persona justa y decente alrededor del mundo. El derrocamiento de los hermanos Raúl y Fidel Castro en Cuba tiene que ser ayudado desde fuera del país, el pueblo solo no lo puede hacer. Las Naciones Unidas lo han estado haciendo con las demás naciones oprimidas. Hay que dar el derecho a éstos de decidir su propio destino y futuro en unas elecciones libres y donde puedan nuestros pueblos, sin coerción alguna, elegir a sus propios gobernantes.

 

Es la hora del esfuerzo conjunto de todas las naciones que respeten en algo su mismo derecho a la libertad. Hay que terminar con la noche y la miseria de los hijos de Haití y Cuba. Hay que darles un nuevo amanecer y la oportunidad de alcanzar la prosperidad para sus ciudadanos.

La democracia barre hoy con los últimos vestigios de la opresión a nivel mundial

 

Diciembre 1994



Pedro Corzo