miércoles, 23 de septiembre de 2009

LA SUBVERSION TOTALITARIA


 

Convertiremos Los Andes en la Sierra Maestra de las Americas. Fidel Castro.                                  

 

 

A pocas personas se les escapa que entre Fidel Castro y Muanmar Khadafi existen profundas diferencias ideológicas pero que el objetivo común de destruir las sociedades democráticas les une. Pero no cabe duda que si algún día, y para nuestra desgracia, logran sus objetivos, tendrán su  propia Guerra de las Salamandras y se destruirán entre ellos.

 

Khadafi es quien más independencia de acción tiene y por ello es mucho más peligroso que-el sátrapa caribeño que está sometido a un férreo control de la inteligencia soviética. La independencia económica de Libia, Cuba está subsidiada multimillonariamente por la Unión Soviética, le permite actuar sin limitaciones y no es difícil suponer que Libia ocupe el espacio subversivo que el castrosovietismo ha abandonado temporalmente.

 

Las diferencias Castro-Khadafi, están implícitas hasta en sus mutuos anhelos de hegemonía  y es que ya en el lejano 1973, en la Cumbre de Argel de los Países No Alineados, el gobernante libio condenó el imperialismo soviético aún más severamente que lo que él denominó imperialismo americano.

 

En esa Cumbre fue Castro, el más fiel lacayo de la URSS, quien se enfrentó a Khadafi. Lo acusó de divisionista y todo parecía indicar que en África había surgido un líder consecuente con la realidad política contemporánea. Lamentablemente no fue así. A los pocos meses Libia estaba en la nómina política soviética; las diferencias ideológicas fueron superadas por el aguzado pragmatismo de las partes. Magnífica lección para muchos de nuestros líderes y partidos democráticos del hemisferio que a pesar de estar identificados en el concepto "democracia", suelen intentar destruirse unos a otros en vez de trabajar juntos.

 

Supuestamente las diferencias entre estos modernos redentores deberían haberse agudizado con  el intervencionismo de La Habana en África. Cuba intervino con su ejército regular en Angola, Etiopía y Mozambique, obviamos las supuestas ayudas técnicas y comerciales en esos y otros países africanos, mucho antes que Libia invadiese el Chad.  Sin embargo, las relaciones entre ambos países mejoraron y en la Cumbre de Los No Alineados en La Habana en 1979, Libia y Cuba asumieron posiciones comunes.

Curiosamente Libia enfocó sus actividades desestabilizadoras a Europa y el Medio Oriente, brindó un apoyo irrestricto a los palestinos y terroristas europeos y dejo para Cuba el África Negra y América Latina, sin lugar a dudas una maravillosa división internacional del trabajo.

 

Después del triunfo de los comandantes  sandinistas de Nicaragua el perfil intervencionista de Cuba en América Latina se  redujo básicamente a El Salvador, Colombia, Grenada, Surinam y Guyana, pero la participación de Libia aumentó como si se hubiese producido un nuevo disloque de fuerzas. Esta participación, en su primera fase, se dedicó a hacer conocer su Revolución Verde, la de Castro era verde oliva y mutó  a roja de sangre, y posteriormente a influenciar activamente en las fuerzas organizadas contra el sistema.

 

Las serias modificaciones que ha sufrido en los últimos años la política castro soviética hacia América, puede  ser consecuencia de que se ha reducido, producto de sus múltiples fracasos, la seducción que ejerció sobre muchos líderes americanos y también porque evidentemente la autoridad de Castro y de su régimen es hoy extremadamente vulnerable.

 

Por otra parte no se puede concluir que la influencia del castrismo y su intervencionismo ha sido erradicada sino que éste  ha cambiado de métodos, que hoy son  más solapados y  dirigidos a los grupos del poder más que a las clases populares; es como si ofreciera una no intervención a cambio de un dejadme vivir y crecer. Cuestión de tiempo. El paso atrás leninista.                                                                                      

 

Esta actitud aparentemente menos agresiva del castrismo ha propiciado que elementos subversivos recaben apoyo de otras fuerzas desestabilizadoras entre las que se destaca ampliamente el régimen libio; respondiendo esto a los intereses de Trípoli y La Habana ya que en base a la estrecha colusión de ambos gobiernos todo parece indicar que Khadafl ha decidido sumir, por lo menos temporalmente,  el patrocinio de la subversión latinoamericana con la anuencia y el apoyo directo del dictador caribeño.

 

La subversión totalitaria es algo que nunca ha desaparecido de nuestro hemisferi. Es un fenómeno latente en nuestras sociedades que se reactiva cuando el enemigo lo considera conveniente. La calma es principio de tormenta y por experiencia sabemos que en toda América hay agentes durmiendo en la espera del contacto, topos prestos a destruir las bases de nuestras sociedades.

 

La ingenuidad de negar el peligro de la subversn y el oportunismo de supervivencia de otros al hacer lo mismo; las mas de las veces por objetivos políticos inmediatos y no por complicidad con el enemigo,  es un lamentable error porque negarse a nutrirse de la realidad es como cometer suicidio. Hay que entender que la subversn es un fenómeno lineal, accidentado pero recurrente , que solo desaparece cuando destruye el cuerpo que ataca.

 

La solidaridad Libia-Cuba se ejemplarizó en la visita que realizóIsidoro Malmierca, Ministro de Relaciones Exteriores cubano a Trípoli a los pocos días del bombardeo de Estados Unidos a Libia, e respuesta a los ataques infligidos a sus intereses en Europa y el MedioOriente. Posteriormente los estrechos contactos que se produjeron entre Castro y Khadafl en Arare en la Octava Cumbre de Países No Alineados de septiembre pasado evidencio aun mas esta solidaridad. Castro, también se entrevisto con A1i Khameini, presidente del Irán y Daniel Ortega de Nicaragua» ¿cual podría ser el objetivo de tan singulares reuniones?

 

Creer que la subversión  y su táctica extrema, el terrorismo, solo se expresa con guerrilleros en las montañas, es de una terrible miopía. La subversión de hoy, extrema derecha o izquierda, en definitiva ambos extremos se confunden, tiene más similitudes con la de los 70 de Europa que con los 60 de la subversión americana.

 

La subversión es un fenómeno internacional, las fuerzas antisistemas aún de diferentes ideologías no son remisas a cooperar entre ellas; en campos de entrenamiento guerrilleros en África del Norte y el Medio Oriente se confunden agentes del Movimiento Social Italia no, neofascistas, con palestinos, lobos grises de Turquía y Fracción del Ejército Rojo de la RFA y es que las consideraciones ideológicas desaparecen ante la necesidad de destruir las democracias.

 

La subversión de los 60 y 70 en Europa, el Medio Oriente y América Latina diferían tácticamente. En A. L. se atacaban las instalaciones gubernamentales, intereses económicos-y funcionarios estadounidenses y existían guerrillas rurales con zonas de operaciones fijas; en Europa y Medio Oriente, y es la táctica que nos aplican hoy; se practica el ataque contra las personas, masivo o individual pero indiscriminado, ataque contra personas y bienes que en muchas ocasiones nada tienen que ver con los asuntos en conflicto, secuestros y como una manifestación de apoyo a la guerrilla urbana, manipulación de manifestaciones multitudinarias, huelgas, incendio de vehículos, barricadas, vandalismo y ataque-a fuerzas policiales para provocar la represión. Esta táctica es sin lugar a dudas menos onerosa en recursos humanos y económicos , y más desestabilizadora que la que Castro y Guevara propiciaron en la década del 60.

 

En América, lo que pudiera considerarse subversión clásica solo resta en El Salvador, Colombia y parcialmente en el Perú. Sin embargo, ningún país del hemisferio, incluyendo-Los Estados Unidos, está libre de agentes desestabilizadores.

Veamos superficialmente, objetivos, métodos y tácticas de la subversión:

Primero.- Atacar el sistema establecido en sus puntos débiles.

Segundo.- Procurar la integración de todas las fuerzas de oposición afines, creando -una superestructura y posteriormente vincular este Frente a las fuerzas democráticas que quieren mejoras socio políticas, obligándolos a la radicalización de sus proyectos por diversos medios.

Tercero.- Aislar al Pueblo de sus gobernantes, usando para ello a los partidos de la-oposición democrática, desarrollando una campana que tienda a subestimar --los peligros que corre el sistema democrático.

Cuarto...- Involucrar a toda la sociedad en la crisis política, creando un clima de " desconfianza pública mediante el miedo, la coección y la intimidación e incentivar el odio contra los distintos sectores de la Sociedad.

Quinto.-  Desatar la violencia política no terrorista; manifestaciones, huelgas, saqueos, rumores de inestabilidad política, ataques a la honorabilidad de los funcionarios etc., complementando ésto con una campaña de des información y diversionismo que tienda a la confusión de toda la vida pública.

Sexto.- Desatar el terror sistemático e indiscriminado en el país, provocando una escalada represiva gubernamental que creará mártires para crear una mística de sangre que alejará aún más al pueblo de sus dirigentes democráticos.

 

Las guerras subversivas de origen totalitario o nacionalista han cambiado el mapa poli tico mundial más que la segunda guerra mundial. Por medio de la subversión se apropió la .R.S.S. de una buena parte de Europa, la subversión comunista produjo el actual gobierno de China, Corea del Norte, Afganistán, Cuba, Nicaragua etc., y la subversión nacionalista logró la independencia de un gran número de naciones africanas porque la subversión es válida cuando se expresa contra un régimen que no deja otra alternativa de cambio o influencia a sus gobernados y por eso es irracional su práctica en la democracia.

 

Castro y Khadafi son piezas de un mismo jugador. Los cambios y ajustes políticos son -tácticos y no estratégicos y funcionan en base a los intereses de uno de Los Amos del Juego. Ambos caudillos responden a intereses transitorios y variables que el Gran Hermano --cambia cuando lo considera conveniente. Los dos, como artífices de la subversión tienen -sus agentes en congelación, frío, pero todo por un tiempo, porque nuestros líderes pueden estar seguros que la Paz no se ha firmado, sino que estamos en tregua.



Julio 1990.